EL ROSA
Del vino, que un dios comparó a su sangre
Del versátil teflón de los delfines
Del laurel, que no sabe que hoy es verso
De un geranio en jardines orientales
De un vitral olvidado de la infancia
De una nube en el ángelus de Amalfi
De la luna entre gasas boreales
De la tibia franela que me abriga
De la veta en el mármol de un Apolo
De las franjas nevadas en el Etna
De las islas de Grecia y de la Acrópolis
De las tersas arenas del desierto...
Es el mismo rosado que hoy he visto
Temblando sobre un labio de muchacho.
(Poema del colombiano Carlos Framb)